La psicóloga sanitaria y emprendedora Paloma Aleñar detectó una señal de alarma mucho antes de que las compañías empezaran a hablar de bienestar emocional como un asunto estratégico. En sus consultas, cada vez más personas acudían tras solicitar una baja laboral por estrés, ansiedad o agotamiento. Pronto confirmó que no se trataba de algo puntual, especialmente cuando contrastó datos y habló con responsables de empresas. Según explica, «las empresas coincidían en que detectaban el problema tarde o que no tenían herramientas ágiles para intervenir».

Esa brecha entre lo que estaba ocurriendo y la capacidad real de las compañías para gestionarlo fue el origen de ConfortMental Empresas, una solución tecnológica que combina inteligencia artificial, psicología clínica y gestión empresarial. Aleñar recuerda el punto de inflexión. «Ahí fue donde vimos que la tecnología podía ayudar a cubrir ese hueco. Sin ese apoyo tecnológico sería muy difícil llegar a tantos empleados y ofrecer un servicio continuo, eficiente y sin perder la parte humana».
El proyecto se construye sobre una convicción clara. No existe transformación real sin métricas ni anticipación. Aleñar lo resume al analizar una situación marcada por lo que define como una crisis de bienestar laboral. «Nos preocupa especialmente el aumento de bajas por ansiedad y agotamiento sostenido, así como la rotación creciente que muchas veces está vinculada a un malestar que no se identifica a tiempo». Según señala, «en muchos casos solo detectan el problema cuando ya es demasiado evidente y la persona necesita una baja. Ahí se actúa desde la urgencia, con prisas y con malestar para ambas partes».

ConfortMental Empresas ha diseñado un sistema apoyado en IA capaz de detectar señales tempranas a través de patrones emocionales, cambios en el lenguaje y evolución del estado de ánimo. Aleñar lo describe como un semáforo. «La IA funciona como un sistema de alerta temprana. Detecta variaciones que podrían indicar riesgo y realiza un primer triaje. Para no perder sensibilidad, cualquier señal pasa siempre por el equipo clínico. La tecnología agiliza el cribado y los psicólogos aportamos criterio, contexto y sensibilidad humana».

El equilibrio entre innovación y privacidad es uno de los pilares del proyecto. Aleñar es rotunda cuando aborda la confidencialidad. «El empleado sabe desde el primer momento que sus datos son privados y que la empresa solo recibe información agregada. Nunca compartimos datos individuales».

El absentismo por razones de salud mental tiene un coste económico millonario en España y un impacto humano mayor. Para Aleñar, la clave está en intervenir antes de que el empleado llegue al colapso. «Cuando acompañas a la persona antes de que llegue a ese punto, se reducen bajas, se evitan recaídas y los equipos funcionan de manera más estable». ConfortMental Empresas incorpora seguimiento continuo, validación periódica y acceso a apoyo psicológico en menos de veinticuatro horas. «Cuando una persona recibe apoyo justo en el momento en que lo necesita, la evolución es totalmente distinta».

Desarrollar la plataforma ha implicado unir psicología, IA y gestión empresarial dentro de una misma solución. Aleñar reconoce que «el mayor reto ha sido traducir necesidades humanas a un lenguaje tecnológico sin perder la esencia». El interés por la plataforma crece especialmente entre empresas medianas y grandes. «El bienestar ha dejado de verse como un beneficio adicional y empieza a entenderse como un aspecto estratégico. Las empresas buscan soluciones más preventivas y menos reactivas».

La visión de Aleñar para los próximos años es ambiciosa. «Queremos que ConfortMental Empresas se convierta en el punto de unión entre el bienestar emocional y la gestión empresarial». El plan pasa por consolidar primero el modelo en Baleares y expandirlo después a nivel nacional. Aspira a que la salud mental deje de ser un tema incómodo y se convierta en un pilar básico de cualquier organización que quiera crecer de manera sostenible.